Una visita al banco

Mi bienamada esposa , recibió un correo electrónico del banco Hipotecate de Por Vida , pues necesitaban hacer algunos cambios en su cuenta , de manera que había que viajar a Concordia, la sucursal del mentado banco ya que es el único existente en la costa del Uruguay. La otra sucursal, está ubicada en Paraná y atiende -como todos ustedes supondrán -únicamente a los clientes de la costa del Paraná.

La torta repartida en dos porciones.

Mitad pa' mí, mitad pa' vos.

La mañana se presentaba fresca y -todavía a oscuras- partimos hacia la estación de servicio YPF a cargar combustible.

Arribamos al lugar y nos atiende solícitamente un joven de unos 24 o 25 años a quien  le digo

-Llename el tanque, por favor. ¿ Ya aumentó el combustible ? 

-Sí, ayer subió de nuevo , pero falta un aumento todavía..o dos...

-! Pero la puta madre ...¡ , exclamo con furia .- ¿ Cuando mierda dejarán de aumentar los precios ?

El playero me mira sonriendo entre dientes y me dice:

- ¿ Premium o súper ?

- Ponele súper , por favor .

Mientras el tanque devora combustible y el marcador gira a velocidad espeluznante (el del precio , claro ) me pregunta

- ¿ Se irá a arreglar esto ? 

Lo miro serio y le manifiesto :

-Mirá, vos sos joven , pero andá acostumbrándote  a que cada diez o quince años , estos hijos de puta nos hacen parir. A mí ya no me hace mella . Yo me banqué la dictadura , le dije en sorna , recordando al pelotudo de 30 años que lo único que debió haber sufrido en su vida habrá sido una pateadura en el culo.

-Igualmente a mí no me importa lo que hacen estos tipos. Yo vengo todos los días a laburar. Si no trabajo nadie me da nada.

-Te felicito,- le digo mientras miraba con desazón los números del surtidor. 

- En la elección pasada no fui a votar -, me dice-

- Yo tampoco -, contesto ,- pero no te hagas drama que no pasa nada . A lo sumo votará algún muerto por vos.

En eso escucho que se corta el suministro de combustible. Miro el surtidor ...Mil docientos pesos... y eso que estaba el tanque a un poco menos de la mitad...

Pagué , y marchamos hacia la autovía ruta 14 .

Poco después  de la curva del balneario de San José, me topo con un engendro que no alcanza a ser ni rotonda, ni desvío , ni nada. Mal iluminado , con un tramo de cemento que comienza en medio de la ruta, hay que eludir el mamotreto hacia la derecha y luego una curva pronunciada hacia la derecha para retomar nuevamente el tramo (hecho pelota ) que lleva hasta San José. Luego de sortear varios lomos de burro tomamos hacia la autovía famosa.

A poco de ingresar a la misma , ya notamos el carril derecho hecho pelota por los camiones excedidos de peso, que ahora transitan plácidamente por la izquierda interrumpiendo el adelantamiento de los automovilistas.

A los tipos no les importa un carajo. Con sus moles en movimiento , marchando a 120 km no les calienta que vos te calientes para poder sobrepasarlos.

Y así, dando bandazos en la ruta llegamos hasta el peaje , donde - amablemente- me sacaron cuarenta pesos por permitirme manejar como si fuera en los autitos chocadores. Los ingresos a los peajes poco menos que en ruinas, mugre por doquier ,baños destartalados , pero - eso sí- con vigilancia por si pretendés hacerte el protestón contra el sistema.

Ingresamos a Concordia , mientras yo puteaba al maldito banco por hacernos viajar cien kilómetros de ida y cien de vuelta para arreglar unos papeles de mierda.

Una vieja Ford elevaba hacia el cielo una nube contaminante , en tanto trasladaba una mezcladora, arena , carretillas, palas , cemento y varias maderas. La marcha se reducía a un traslado de 40 km a la hora , de manera que -desde lejos - se observaba como la chata marchaba por la ruta inmersa en una nube negra y un olor a querosén, gasóleo y nafta, que volteaba a los pájaros que osaban trasponerla en su vuelo mañanero.

Llegamos , finalmente a las inmediaciones del Banco Hipotecate de Por Vida .

-¿Donde habrá un estacionamiento ? - interrogo a la vasca, que sale refunfuñando rumbo a un kiosco que tiene un cartel a todo color que reza : " Drugstore " .

-¿A que venimos a la farmacia ?, le digo a mi señora haciéndome el boludo.

-Mirá ,Raúl ...no empieces a hinchar tan temprano con tus boludeces y dame plata que voy a pagar el estacionamiento.

-Pedí un turno de dos horas, como en el telo,- le digo en broma pero calculando que deberá ser el tiempo empeñado en realizar el trámite.

Mi querida esposa paga las dos horas. Sale del kiosco al que le dicen farmacia , pero en inglés y me dice sonriente:

-Me salió veinte pesos..

-No puede ser , si en Paraná cualquier estacionamiento te cobra cuarenta y cinco o cincuenta pesos la hora.

-Ocurre que acá el estacionamiento lo cobra el municipio y te controlan con los datos de la patente y el teléfono del que recorre el sector.

Pienso de inmediato: " Alguno me está robando a dos manos...en Paraná, claro.

La cosa es que marchamos tres cuadras por la peatonal , allí doblamos dos cuadras a la izquierda y nos encontramos con un antiguo edificio en donde funcionaba el citado Banco.

Ingresamos, pusimos los datos en el sistema electrónico que te escupe un papel con un número y luego nos sentamos observando como estúpidos una colorida pantalla con publicidad y varias pantallas pequeñas señalando los números de los turnos , el box, la caja , el escritorio o lo que sea que busques.

La cosa es que no podés sacar la vista del adminículo pues a cada momento van variando las indicaciones y si no estás atento, después pasas por boludo ante los empleados.

Nos toca el turno O 74568 , así que nos disponemos a esperar .

Mágicamente , se escucha a los pocos minutos un sonido como de un gong oriental y aparece nuestro número en pantalla.

Felices , corremos ambos tomados de la mano y sonriendo  como ancianos felices y adinerados para ser recibidos por una flaca vestida o mejor dicho, empoderada como varón, con plantalones y saco negro y un pañuelo rosa o un color parecido (no olviden que soy daltónico ) , botitas negras llenas de pequeñas tachas , que - felizmente- mi esposa no alcanza a divisar pues si no era hora de que todavía estamos buscando un par similar.

La flaca, esbozando una especie de sonrisa fingida, dice:

-Tome asiento señora , por favor.

A mí ni me registra, pero supongo que como está empoderada , no me da ni cinco de bola como maldito macho que soy.

A los treinta segundos, ya tutea a mi mujer como si la conociera desde hace treinta años. Explica solícitamente que el Banco ha realizado una reconversión y ahora habrá que pagar directamente a la institución , obviando el Pago Fácil o cualquier otro sistema similar.

-Hemos tenido muchos problemas,- dice la flaca con cara compungida . -Ahora establecimos nuevas reglas y estamos actualizando el sistema para otorgarle también una nueva tarjeta que llegará a su domicilio en diez o quince días.

Me mantengo sentado junto a la vasca, que está vestida con una creación suya tejida al telar , calza , botas cortas y un pañuelo de un color dorado , contrastando con toda su indumentaria negra.

Está hermosa como siempre .    

La flaca comienza a teclear con largos dedos de pianista en los que luce  dos anillos de plata engarzados en madera noble , y con una sonrisa Odol en el Aire , dice:

-¿ A que te dedicás ?...

-Jubilada,- contesta la vasca.

La sonrisa de la flaca se esfuma como el vapor de la helada con el primer rayo de sol.

-¿ Cuanto cobrás ?

-Doce mil pesos .

La flaca ya pierde totalmente la compostura y comienza a teclear , mientras observa la pantalla y saca papeles de un cajón, pide el documento, gira en su sillón y levanta la tapa de una copiadora para registrar el documento en ambas faces.

Levanta un teléfono , marca un interno y ordena.

- Enviame información de estos datos ...

Mientras tanto, alcanza una veintena de planillas mientras dice:

-Firma, aclaración, número de documento .

Mi mujer firma todo sin hesitar y yo tengo ganas de intervenir , pero como fui excluido por la empoderada, mantengo la boca cerrada.

Suena el teléfono, y alguien le señala algo a la flaca, que dice un lacónico 

- Ahá...

Liliana sigue firmando papeles como si fuera Lopecito saliendo de la prisión.

Yo me pongo a escuchar a un flaco que habla en un escritorio contiguo con otro empleado del banco.

Le dice que es tornero que inventó no sé que adminículo y que comenzó a venderlo muy bien en muchas partes, pero que necesitaría docientos cincuenta mil pesos para poder encarar su negocio con eficiencia.

Al cabo de algunos minutos, llamados telefónicos y observaciones varias, el empleado le dice:

-Mirá , te podemos dar ochenta mil pesos . Te lo depositamos y si querés lo retirás ahora o cuando vos quieras.

El flaco hace una mueca, casi le rueda una lágrima por la mejilla . Algo le dice a media voz al empleado .

Éste, le manifiesta inmisericorde:

-Son las reglas del Banco Hipotecate de Por Vida...

Y allá salió el flaco con su compañera rumbo a la puerta pensando "¿ Por qué no habré sido jardinero, o chofer ...? ...seguramente hubiera tenido más suerte en la vida ..."

En eso escucho a la flaca que dice seria:

-....Y la tarjeta te va a llegar dentro de diez o quince días , por correo privado , de manera que ahora vas a poder pagar directamente al banco sin tener que pasar por Pago Facil.

Saludamos , damos las hurras y nos vamos de vuelta rumbo a casa , como dos jubilados felices y adinerados.

El viaje, me salió más de seiscientos pesos , que tuve que afrontar con dignidad para salvar a la magna institución bancaria que nos ha brindado la oportunidad de poder utilizar sus increíbles servicios, previo pago de veinte pesos -por caja -para habilitar el nuevo servicio .

Ya en la ruta, autovía o lo que quede de ella, volvemos a ser esquilmados con otros cuarenta pesos en el peaje.

A los pocos metros me detiene la Gendarmería , me pide documentos, registro de conducir y me demoran por varios minutos pues ha habido un asalto y parece que el identikit muestra una cara muy similar a la mía.

En la radio, escucho que le dieron cinco años y diez  meses de cana  a Boudou..

! Qué lindo que es tener vicepresidente ¡