Los profesionales

Como ya soy veterano en estas lides, he aprendido que si uno va al PAMI , pide un turno "urgente" , y se lo brindan
-bondadosamente- para dentro de dos meses , hay que recurrir a algún ardid para acelerar el trámite.
Por ejemplo, averiguar en alguna ciudad cercana si existe un sanatorio que atienda a los jubilados.
En Villa Elisa, a unos 38 km de Colón, puede uno conseguir que lo atiendan mucho más rapido que aquí .
Pero, para poder lograr este cometido, debe uno pagar 40 pesos a modo de "colaboración " con el sanatorio .
Imagino que con esos emolumentos, lograrán los empleados comprarse la yerba, el café, azúcar , galletitas y alguna que otra golosina para sobrellevar la tediosa tarea de atender a tantos vejestorios.
Aquí , en Colón , la cosa es un poco más complicada.
Si uno logra el turno - con suerte para dentro de los próximos sesenta días - cuando llegue el momento de ser atendido por el "profesional", éste le solicitará un plus de 150 o docientos pesos pues dice muy suelto de cuerpo :
-El PAMI está atrasado con los pagos -
Una hermosa excusa para lograr unos pesos extra.
Defenestrar al PAMI , organismo al cual -seguramente- le pasarán sumas largamente excedidas en sus costos cuando tengan que operar a algún jubilado o , directamente, se la endosarán a los familiares del susodicho.
Siempre hay un anestesista que pide más dinero, un traumatólogo que le manifiesta al paciente que la prótesis nacional "no sirve " y entonces él se encargará de conseguir la importada, que tiene un costo mayor ,claro.
Pero - eso sí- uno deberá hacerse cargo de la diferencia.
Y así sucede con cada situación complicada que debamos afrontar: del médico de cabecera ,al PAMI.
Del PAMI al sanatorio.De allí , a la farmacia para firmar 432 papeles , sacar troqueles, escribir por cada medicamento el nombre y apellido, número de documento, domicilio , teléfono y poner la firma en cada una de las papeletas .
Finalmente pasar el exhaustivo control de tu jubilación .
Si se pasa de la mínima...chau descuentos
Ni para ingresar al Pentágono te piden tantos datos.
Pero también está la visita habitual que uno realiza cada seis meses para los controles de rutina.
Cuando uno está en esa situación , los "nuevos viejos" y los "viejos veteranos " pasan por el consultorio cada tres minutos, como por una fábrica de chorizos.
Una vez llena la tripa, el nudo se cierra y pasa el próximo.
Hace pocos días me dirigí a mi médico de cabecera para el mencionado control.
De entrada ,miro a la secretaria con cara de orto , como para ir marcando territorio.
- ¿ Venis a hacerte atender ? , pregunta con descaro y tuteándome sin hesitar.
-No...vengo a preguntarte el pronóstico....- ¿ lloverá mañana ? - le digo , en tanto le brindo una mirada de soslayo .
-Jeejeje....que gracioso - responde socarrona .
Otro viejo, mas pelotudo que yo , atropella entre los bastones de tres que esperan a que los atienda la diligente secretaria, y casi se clava de cabeza contra el escritorio al enganchar la gamba en una de las tres garras del bastón del que estaba en primer lugar.
-¿ Ya está atendiendo la doctora ? - interroga con voz temblorosa .- Porque yo tenía turno el lunes a las diez pero me olvidé y tampoco traje la receta de las pastillas para le memoria ....
- Sentate , Santiago ....ya te van a atender- dice diligente la secretaria entre el teléfono que suena sin cesar y la tos carrasposa de una sexagenaria acompañada por un cuarentón muy bien vestido (gracias a la jubilada, claro).
- Bueno - le digo -¿ me vas a atender o voy y te denuncio por abandono de persona ? .
-Por favor, no me "volvás" loca , acá tenés el turnito
-¿Puedo sentarme en la sillita ? - le digo - siguiendo con los diminutivos.
-Dale- es la escueta respuesta
Viejos, viejas, ancianos decrépitos y otros no tanto, entran y salen cada tres ó cinco minutos a lo sumo, del consultorio.
Imagino la máquina de hacer chorizos , y la tripa que se va llenando , en tanto el profesional va cerrando el hilo para el próximo embutido.
Cinco minutos más tarde me convierto en el nuevo chacinado del sistema .
La máquina - impiadosa , despiadada, brutal - hace correr el relleno y el piolín sigue cerrando los chorizos cada tres minutos.

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