Muerte sùbita

Llegado a esta edad del jubileo , uno hace caso omiso a su doctor de cabecera que siempre recomienda no atosigarse con las comidas, comer sano, no beber en demasía, caminar todos los días, tomar mucha agua, entretenerse con alguna actividad diaria , cantar, tocar el piano, pasear con los nietos , aprender computación y pagar siempre los impuestos.
Como soy un paciente con poca paciencia , nunca le doy ni bola.
Pero tanto chorizo, aceituna,asado,vino , sexo....(¿de que se ríen ? ...ya le contesté el otro día a Macri que los viejos también le damos a la matraca ....).
A propósito , uno de mis nietos más grandes me preguntó el otro día :
-Abuelo, ¿cuanto dura el sexo a tu edad ?
-Dura lo que dura dura - respondí con seriedad.
-Ah...- fue la única contestación.
Creo que todavía está tratando de develar la respuesta.
Pero hecha la acotación, diré que toda esta alimentación a la que he sometido a mi ya destartalado esqueleto , que viene a ser el andamiaje que sostiene a todo mi cuerpo , me cobró su precio con creces.
Había yo leído muchas veces acerca de la muerte repentina.
Y me llegó la hora.
Tuve una muerte súbita, lo que me ocurrió súbitamente.
Con la urgencia del caso, me trasladaron rápidamente luego de una hora y media de espera en una ambulancia que rezaba en su costado : " Clínica El Jeringazo " , Unidad Coronaria de Alta Complejidad .
Ya para esa instancia , mi alma vagabundeaba en la paz mas absoluta aunque no ví en ningún momento - debo confesarlo - la luz al final del túnel.
Al parecer había mucho consumo en el Purgatorio y esta circunstancia hizo saltar la térmica o tal vez los altos costos de las boletas de luz hicieron que uno ingresara al otro mundo por el túnel, pero con la luz apagada.
Hecha la aclaración , diré que me llevaron en un traqueteado viaje por las calles colonenses , más apropiadas para una competencia de motocross que para el tránsito de una ambulancia de alta complejidad .
Púseme entonces a observar atentamente mi entorno viendo que los complicados aparatos con que contaba la "unidad coronaria " se remitía a un tubo de oxígeno , una camilla , un estetoscopio , un botiquín de primeros auxilios con algunas gasas, unas jeringas descartables, algunos analgésicos y varios talonarios de boletas de traslado.-
- " Este viejo cagó fuego " - escuché decir a uno de los camilleros mientras atendía un llamado en su celular en el que su mujer le preguntaba a que hora llegaría para preparar el asado.-
- " En cuanto llegue a la clínica te llamo, estamos llevando un fiambre ...a propósito, comprate unos salamines picado fino para la previa ..." .
- " Che, como terminó el partido ? " ,- escuché decir al conductor al tiempo que mi cuerpo casí se cae de la camilla ante la brusca frenada de la " unidad de alta complejidad " . " - La puta que lo parió...cuando carajo van a arreglar las calles ? " - dijo el camillero mientras enviaba un mensajito a su mujer y pegaba con la cabeza en el techo.
Llegamos sin otros sobresaltos a la Clínica El Jeringazo en donde todo estaba preparado esperando al infartado , vale decir yo ."
-¿ Donde están los familiares ?" - gritaba una secretaria.
- "¿ Tiene obra social ? " preguntaba otra gorda sargentona -" Soy el doctor Garcatutti " - se escuchó decir por un pasillo "- Si no se ponen con la mosqueta antes , yo no intervengo" dijo con cara de hijo de puta, en tanto yo - siempre desde arriba- le miraba el culo a una enfermera jovencita y que contaba además con unas tetas para el infarto...¡ justo lo que yo tenía ! ...( el infarto , no las tetas )
Finalmente llegó mi señora , llorando y gritando órdenes a todos.
-" No les voy a permitir que dejen ahí tirado a mi marido....no pueden decirme que la obra social está atrasada...! Yo soy la que atiende la obra social....¡ ...! Tenia razón mi pobre esposo....¡ ! Atiendanlo yá si no quieren que les meta una denuncia por abandono de persona ! " .
Yo miraba y pensaba "¿ por qué razón no los mandará a la mierda directamente ? pero me acordé de inmediato que mi señora siempre me decía:
-" No, Raúl...hay que decir las cosas con altura " .
Ante el amable pedido y la presentación de los papeles, rápidamente en 30 minutos me llevaron a la UTI, me metieron cables hasta en el culo y conectaron el desfibrilador para aplicarme míseros 186 voltios ( tensión registrada en ese momento ) mientras yo bellaqueaba sobre la camilla como potro enloquecido en el palenque y los enfermeros , médicos, paramédicos, contadores , choferes y anexos se estrellaban unos con otros corriendo afanosamente para verificar si era cierto que yo estaba inscrito en la obra social , si mi señora no había presentado ninguna denuncia, si podían agregar algunos ítems para engrosar la cuenta y si querían los familiares aceptar la cremación .
Yo observaba todos los movimientos desde arriba, cómodamente ubicado en un plácido estadío de paz y tranquilidad, cuando de pronto, los 186 voltios se transformaron repentinamente en 298 , ante una subida de tensión (¿ qué raro , no ?) y mi cuerpo - que en ese momento era objeto de otra aplicación de corriente- saltó por los aires como gato asustado y en ese momento percibí un retorno ( pero no de guita ) a mi cuerpo magullado, dolorido, quemado y vapuleado por la ciencia médica.
Con un grito estentóreo retorné de la muerte , entre un mar de lágrimas de las enfermeras, mis parientes más cercanos y los médicos que manifestaban a viva voz:
-"! Menos mal que salvamos a este viejo...¡ ...Ahora lo tenemos otra semana más en terapia y de paso juntamos para la fiesta de Navidad..."
- ! A ver, Teresa, anotá dos horas de resucitación, 42 aplicaciones del desfibrilador , un tubo de oxígeno , los honorarios del doctor Garcatutti , dieciseis jeringas descartables , traslado en unidad de alta complejidad , dos unidades de suero , y una semana más de UTI ...! con este viejo nos hicimos el día...! menos mal que el hijo de puta resucitó...¡
No se rían.
Estas cosas suceden a diario en el Fabuloso Mundo del Jubilado.